La emoción se palpa en el ambiente cuando los primeros corredores encaran la recta de meta. Todos los equipos han maniobrado para situar a su sprinter lo mejor posible, pero sólo uno de ellos se llevará la victoria.
¿Se arriesgará tu equipo a salir en cabeza y agotarse? ¿será mejor correr resguardado en mitad del pelotón? ¿o sorprender a todos con un ataque de última hora? ¿encontrarás la táctica adecuada? ¡Cualquiera puede correr, pocos pueden ganar!